Pedro, favor de responder: ¿Qué es "Pedro Responde"?

Pedro simula ser un "alma en pena" que responde cualquier pregunta que le hagan, al estilo del juego de la copa.
Nuestros amigos no van a poder creer que "Pedro" les responda con exactitud el color de sus ropas, lo que tienen en la mano, datos del pasado o cualquier pregunta personal que se les ocurra.

Tarot virtual - Respuestas precisas

Este programa sorprende hasta al más incrédulo y los tienta a encontrar explicaciones descabelladas.
Hasta los menos supersticiosos se van a quedar sin palabras cuando "Pedro" conteste a todas sus preguntas.

Se trata de un juego

Pedro Responde es un juego para sorprender a los demás, comparable a un truco de magia. No tiene sentido que lo juguemos solos, porque para que responda tenemos que saber un truco.

Revelando el secreto

Entonces... ¿Cómo puede ser que un programa responda con exactitud todo lo que le preguntamos? Para eso te invitamos a ver la sección "El truco"...

El Truco

Mientras que la Tabla Ouija® generó siempre dudas sobre la autenticidad de su funcionamiento, este nuevo "Tarot Virtual" se explica con el "paso a paso" a pie d página:

miércoles, 12 de septiembre de 2007

Objetivo del programa

El objetivo del programa "Pedro Responde" consiste en demostrar que a veces, ante misterios que no nos podemos explicar (en este caso que "Pedro" responda) llegamos a creer en cosas que no son.

Muchas veces, mecanismos similares son utilizados por tarotistas, videntes, astrólogos, parapsicólogos, etc. que se aprovechan de quienes, en su buena fe, creen en ellos, lucrando en ocasiones con las necesidades ajenas.

Este inofensivo programa intenta demostrar que siempre hay una explicación para todo, aunque esa explicación no esté siempre a nuestro alcance.

El origen de las creencias

Desde los comienzos de la historia de la humanidad, el hombre intentó encontrar una explicación para cada suceso. Cada vez que esa explicación estaba lejos de su comprensión racional, daba nacimiento a nuevos mitos, leyendas, creencias y por qué no religiones.

Con el transcurrir de los siglos, muchas de esas incógnitas se fueron revelando a través de la ciencia, pese a que estuvieron quienes no quisieron ver la verdad y siguieron fieles a sus creencias.

Las creencias hoy en día

En las puertas del siglo XXI , el lugar que ocupan las creencias en la vida cotidiana es aún sorprendente.

Prueba de esto es la amplia difusión que tiene el horóscopo en periódicos, radios y hasta en el celular.

Esto se suma a la fiebre por las predicciones, donde libros escritos por "astrólogos" llegan a estar entre los más vendidos en algunos países.

El respeto es la clave

Es en este ámbito donde resulta fundamental el respeto por las creencias ajenas.

Sin embargo, esperamos que este programa ayude a pensar dos veces antes de creer en un hecho sobrenatural.

Entonces, después de la experiencia "Pedro Responde"... ¿Creer o no creer?

Bueno, esto es algo que queda a criterio de ustedes…

Opinión

¿En dónde está la libertad?, es la pregunta que finalmente me planteo después de analizar lo que pasó en mi caso: durante muchos años en mi infancia fui bombardeado de ideas religiosas e historias de manifestaciones espirituales. Cuando crecí me propuse investigar y me negué a aceptar lo que sólo por repetición durante mi infancia me hicieron creer.

Llegó un momento en que me sentí libre de todas estas ataduras, me volví escéptico y objetivo analizando todo con la razón.

Sin embargo caí redondito con este programa, mis hijos practicaron conmigo tu programa y después de un rato de cuestionamientos objetivos y escépticos, acepté la posibilidad de que fuera cierto, que un espíritu estaba entre nosotros, pero ¿cómo? Si es un programa creado por un ser humano, es una simple computadora...

Ante la contundencia de las respuestas –obviamente mis hijos conocían detalles finos de mi vida y de nuestro hogar– cedí y caí nuevamente en los prejuicios de la creencia a ciegas de lo sobrenatural.

Después de que mis hijos no quisieron continuar más con el juego –será porque me vieron muy mal, emocionalmente contrariado– y me explicaron en qué consistía, tuvimos un largo rato de risas y bromas sobre el particular.


Unos días después me puse a reflexionar sobre las ataduras que tenemos a través de las creencias que nos inculcan desde la infancia.

Conforme vamos adquiriendo conocimiento nos alejamos y rompemos estas ataduras, a mayor conocimiento mayor libertad decimos, pero ¿en verdad somos libres? O sólo se quedan nuestras creencias en un rincón de nuestra memoria, están pasivas, poco utilizadas, pero ahí están, y basta con apretar el botón apropiado para que surjan nuevamente. ¿No se pueden eliminar por completo?

Si esto es así, entonces ¿En dónde está la libertad?

latidos